domingo, 6 de enero de 2013

Poetas y escritores coahuilenses









A veces los libros nos llaman, otras los encontramos. De vez en vez gusto de expurgar en librerías de viejo, o para decirlo mejor, en basureros de libros. Como pepenador bibliográfico, hay que tener buen ojo para las búsquedas. También hay que estar dispuestos a ensuciarse, a levantar polvo. Como quien encuentra la aguja en un pajar, en ocasiones he encontrado auténticas joyas entre libros que aparentemente no valen nada. 
En mis apartados, ya cuento con una pequeña biblioteca decimonónica. Igualmente guardo con especial cuidado primeras ediciones, libros raros o casi inconseguibles del siglo pasado.

Recién me encontré un libro pionero sobre la literatura coahuilense. Fue publicado en París, en 1926, bajo el sello editorial de Les presses universitaires de France, 168 páginas. Cuando lo tomé no daba crédito de lo que leí en la portada: “Anthología de escritores y poetas coahuilenses”, escrita por Manuel J. Rodríguez Tejada, quien fue profesor de latín, literatura y economía política en la Escuela preparatoria Ateneo Fuente, en Saltillo.

Lo revisé dos y tres veces, ¿era real? Por un precio irrisorio me lo llevé a casa, luego cotejé en varios catálogos de biblioteca para dimensionar su valor. ¡Sí! la edición no sólo era auténtica y estaba en buenas condiciones, sino se trata de un trabajo pionero para su época. Rodríguez Tejada, un profesor de Saltillo, se dio a la tarea de revisar quiénes y qué en Coahuila, habían escrito poesía. 

En la introducción, el autor escribe: 
“Hace pocos años, empecé a coleccionar con paciencia de benedictino, versos de mis paisanos y colegas… tuve piedad de esas poesías diseminadas en revistas y periódicos provincianos…”.
Así nació la primera antología de escritores y poetas coahuilenses, que buscó resaltar “la gloria intelectual de Coahuila”.

Hace varios meses, Javier Villareal Lozano (no confundir con el famoso criminal), reseñó en Zócalo las diversas antologías que se han publicado en el estado. Donde por cierto, y ojalá su palabra encuentre eco en la Universidad Autónoma de Coahuila o en la Secretaría de Cultura, para que la “Anthología” de 1926 se reedite.

La lista de Rodríguez Tejada empieza por supuesto con el poeta trágico, Manuel Acuña, y pasa por nombres que ahora, con excepción de algunos memoriosos, prácticamente hemos olvidado. De José García Rodríguez a Rafael Téllez Girón, pasando por Carlos Fernández Blanco, Enrique de la Fuente, Mariano Viesca y Arizpe, Hildebrando Siller, Jacobo M. Aguirre, Manuel Aguirre Berlanga, Melchor C. Cadena, entre otros. También están, más conocidos, Carlos Pereyra, Artemio Valle Arizpe y Julio Torri. Para cada escritor, el autor hizo una breve introducción, aporta sus comentarios y añade algunos poemas. Esperamos que pronto, pueda difundirse al menos una versión digitalizada.

Posdata
Para los amantes de los estudios cervantinos, el libro de Rodríguez Tejada, también contienen una pequeña monografía sobre el Quijote de Miguel de Cervantes.

2 de enero 2013
Milenio http://laguna.milenio.com/cdb/doc/impreso/9168571