domingo, 22 de noviembre de 2015

Bikes vs Cars

A pie o en automóvil, en camión o bicicleta, el transporte es el pan de cada día en las ciudades. No sé a ustedes, pero a mí me aburre manejar, más cuando se trata de largas distancias. Cada vez que puedo, prefiero andar o trasladarme en bicicleta. En el pasado lejano nos forjamos como grandes caminantes. Uno puede imaginar la necesidad vital de aquellos hombres al caminar, al observar, al construir el espacio desde esos recorridos pedestres. En el presente somos irredentos sedentarios y el automóvil parece "facilitarnos" todo. No es casual que bajo esa lógica, el diseño de nuestras ciudades también pierda sentido para las personas y por lo tanto, la dimensión de la escala humana. En la modernidad, construimos sin pensar en el viento y la luz, porque sencillamente tenemos refrigeración e iluminación artificial. Bajo esa referencia, tenemos generaciones de arquitectos que se olvidaron del entorno. Igual sucede con las ciudades, que han sido modeladas a imagen y semejanza de los automóviles, y no de las personas.
Para no ir tan lejos, en mi ciudad, Torreón, las principales obras públicas de los gobiernos son millonarios puentes vehiculares. Recientemente se inauguró un centro deportivo y comunitario con una inversión de 60 millones de pesos. Pero dos puentes, que actualmente se construyen, consumirán 450 millones. ¿Cuántas plazas y espacios de convivencia abiertos se harían con ese dinero? Sin embargo, esta situación local de inequidad y mala política, no es exclusiva de una ciudad, sino es compartida por muchas ciudades.
Gracias al colectivo de mujeres ciclistas, Bicionarias Laguna, por fin vi el tan esperado documental del director sueco Fredrik Gertten, "Bikes vs Cars" (2015). Oportuna fue la exhibición de Bicionarias, porque tomaron la calle el sábado pasado, para hacer una presentación abierta a los peatones durante Moreleando.
El documental llega a nuestro país por la promoción de la Red Nacional de Ciclismo Urbano, en conjunto con Ambulante y Greenpeace México. "Bikes vs Cars" expone de manera puntual los problemas y el malestar que viven tantas ciudades en el mundo por el dominio de los automotores, incluso en detrimento del ambiente y las personas mismas. Al mismo tiempo, aunque la narrativa es avasallante en cuanto a la hegemonía de los vehículos para el diseño urbano, aparece también una minoría alentadora que se mueve en dos ruedas: los ciclistas. Los Ángeles, ciudad de México, Sao Paulo, Toronto, por mencionar algunas ciudades, presentan el común denominador de tener grandes problemas de movilidad urbana, no sólo por el tráfico, sino por las inequidades que genera un modelo basado en el automóvil. Entre otras cosas, se tienen más carreteras y espacios para estacionamientos, que espacios públicos como parques y banquetas. Por lo mismo, la imagen que más representa a las ciudades del automóvil, es la bahía de un estacionamiento. Y sin embargo, como plantea el documental de Gertten, subyace en el uso de la bicicleta una alternativa revolucionaria a los problemas que conllevan 1,000 millones de automóviles. Insisto en la palabra subyace, porque a pesar de los graves problemas de movilidad en las ciudades (mayor costo, mayor tiempo en el tráfico, contaminación ambiental, muertes), la tendencia actual apunta a un crecimiento mundial de la industria automotriz. En la próxima década podríamos escalar a 2,000 millones de vehículos. Ante esa cultura dominante, es utópico tratar de pensar de otra manera, no obstante hay minorías que se resisten: colectivos ciclistas, ciudades como Copenhague y Ámsterdam. Para el caso, también podemos agregar esfuerzo notables en Curitiba y Bogotá con acceso a transportes urbanos masivos, más eficientes que los automóviles.
"Bikes vs Cars" es una reflexión bien fundamentada sobre la relación entre la calidad de vida y la movilidad en las ciudades. Encontrarán buenos datos y testimonios, comparaciones, y sobre todo, alternativas. Vean el corto en You Tube: https://www.youtube.com/watch?v=et8iEIPhooM
5 de agosto de 2015
El Siglo