domingo, 21 de julio de 2013

Gómez, Palacio de la lectura


Siempre hay una buena ocasión para leer. Antes de dormir, en el camión, en cualquier espera que de unos minutos apacibles al lector. Y hasta en bicicleta, diría Gabriel Zaid. La lectura nos aligera, tal vez hasta nos hace un poco más civilizados, pero sobre todo, la lectura es gusto, es placer. Sin duda muchas cosas no las podemos cambiar, pero una buena novela, un buen cuento, compensan ese deseo. Nos ayudan a imaginar otros mundos.

Más como adicción que como hábito, siempre cargo uno o varios libros. Hasta la espera más insignificante nos permite pasar mejor el día. Ya sea en la cola del banco, en algún viaje, en el metro, o en esas aburridas esperas en los aeropuertos, la página de un libro siempre está a la mano. Hace años el gobierno del DF lanzó un programa de lectura en el transporte: “leer de boleto en el Metro”. Fue tanto el gusto por los lectores, que jamás alcancé un libro. Hasta llegué a pensar que esos libros eran un mito.

En los caminos de la lectura, la alcaldesa de Gómez Palacio, Rocío Rebollo, apoyó un amplio programa de fomento a la lectura a través del Instituto Municipal de Cultura que dirige con tino la maestra Renata Chapa. La tarea no es sencilla, sobre todo, porque su apuesta es a largo plazo y no se ve como las obras tradicionales que suelen hacer los gobiernos.

El objetivo del programa “Gómez, Palacio de la lectura”, es promover la lectura y el reencuentro creativo, lúdico, resiliente y útil para los ciudadanos, a fin de generar mejores condiciones de vida. Si en los últimos años le hemos pedido tanto a las armas, ¿por qué no hacerlo con las letras?
La semilla de una serie acciones para alentar la lectura entre los gomezpalatinos, acaba de encontrar un merecido reconocimiento. El municipio ganó el honroso premio de Ciudad lectora, que otorga la Conferencia Nacional de Instituciones Municipales de Cultura A.C. (CONAIMUC), con el apoyo de la Organización de Estados Iberoamericanos(OEI). A través de una serie de programas, el gobierno local se propuso promover la lectura no solamente en pequeños foros, sino en forma multitudinaria e incluso, en los viajes cotidianos que realizan los taxis rosas de la ciudad. Programas como “Leyendo se entiende la gente”, “Un cuento que cuento contigo”, “Leo, luego existo”, “¿Quieres que te lo lea otra vez?”, “En la voz de” y la “CafeteLEEría” durante los paseos dominicales del “Biclatur”, distinguen a Gómez Palacio como una ciudad lectora. En otras categorías, también fueron premiados los municipios de San Pedro Garza García, Nuevo León, y Durango capital. Es sintomático de nuestra cultura, que la categoría de bibliotecas públicas municipales se declaró desierta. ¿Qué no habrá algún municipio en el país que maneje con calidad e innovación esos espacios públicos?

El próximo mes de agosto, se entregarán los premios en la ciudad de México. Eso implica, además de rescatar el nombre de la ciudad, que se publicará la experiencia exitosa del programa para que otros gestores culturales encuentren ejemplos replicables en sus localidades. Sin duda, una buena noticia para Gómez Palacio, para La Laguna. ¡Felicidades!

5 de julio 2013
Milenio http://laguna.milenio.com/cdb/doc/impreso/9185353