viernes, 11 de noviembre de 2011
Correr a un político
En un histórico referendo, los ciudadanos del distrito 18 en Arizona, corrieron esta semana a Russell Pearce, senador y autor de la famosa ley antiinmigrante SB1070. El procedimiento fue sencillo: en el verano los votantes recabaron firmas para solicitar la revocación del político, requería al menos 7 mil, pero llevaron más de 10 mil. Esta semana se realizó la votación que sustentó la revocación del afamado senador. La llamada reforma política en nuestro país mutiló ese medio de rendición de cuentas. De esa manera, los legisladores mexicanos cerraron la puerta a los ciudadanos.
11 de noviembre 2011
Milenio http://laguna.milenio.com/cdb/doc/impreso/9060170
El legado de Calderón
En algún momento, todo expresidente se ve frente al espejo de la historia. ¿Cómo será recordado Calderón? ¿Qué se dirá de su mandato? Para algunos como Salinas, existe la obsesiva y vana labor por limpiar su imagen de la corrupción. Otros, como Fox, llevaron la frivolidad más allá del sexenio. Hoy el presidente Calderón enfrenta un duro juicio por la “guerra” contra el narco. Quizás será recordado como el valiente presidente que le declaró la guerra a los criminales, aunque pesa más el presidente de los 50 mil muertos. No se duda de la aprobación y popularidad que registra en las encuestas, pero tampoco se excluye el mal de la violencia y la constante percepción de que van ganando los criminales.
En ese sentido, la organización internacional Human Rights Watch (HRW), acaba de publicar un extenso informe titulado “Ni seguridad, ni derechos”, 2011. El documento no sólo es una dura crítica al saldo que deja el gobierno de Calderón, sino es una exhaustiva investigación sobre las violaciones a los derechos humanos. Cuántas veces no hemos escuchado de las autoridades decir que “eran criminales”, cuando después de un enfrentamiento se acumulan las muertes de civiles.
Lo documentado por HRW nos indica que los casos de violaciones no son aislados. Chihuahua, Guerrero, Baja California y Tabasco aportan evidencia al respecto. El estudio cuestiona seriamente la efectividad de la intervención militar. Y tiene razón en parte, pero por otro lado, el ejército ha ofrecido respaldo en ciudades donde la policía quedó pulverizada. ¿Qué otra institución podría hacerlo? Quienes viven en poblaciones como Torreón, Monterrey, Reynosa, Juárez o Acapulco lo saben bien. El riesgo es alto, pero también es alta la confianza de la población en el ejército. Más nos vale reconstruir nuestras instituciones civiles a fin de mantener esa confianza en el futuro. Confianza que no se tiene en los jueces. Por lo mismo, HRW denuncia un patrón de abuso e impunidad que alcanza a las autoridades judiciales. Porque en esto va la fuerza, pero también la capacidad de un sistema justicia que no ha sido depurado.
En la locura de los enfrentamientos, ya comienzan a surgir voces que ven en la legalización de las drogas una alternativa a considerar. No obstante, ese no será el legado de Calderón.
11 de noviembre 2011
Milenio http://laguna.milenio.com/cdb/doc/impreso/9060170
En ese sentido, la organización internacional Human Rights Watch (HRW), acaba de publicar un extenso informe titulado “Ni seguridad, ni derechos”, 2011. El documento no sólo es una dura crítica al saldo que deja el gobierno de Calderón, sino es una exhaustiva investigación sobre las violaciones a los derechos humanos. Cuántas veces no hemos escuchado de las autoridades decir que “eran criminales”, cuando después de un enfrentamiento se acumulan las muertes de civiles.
Lo documentado por HRW nos indica que los casos de violaciones no son aislados. Chihuahua, Guerrero, Baja California y Tabasco aportan evidencia al respecto. El estudio cuestiona seriamente la efectividad de la intervención militar. Y tiene razón en parte, pero por otro lado, el ejército ha ofrecido respaldo en ciudades donde la policía quedó pulverizada. ¿Qué otra institución podría hacerlo? Quienes viven en poblaciones como Torreón, Monterrey, Reynosa, Juárez o Acapulco lo saben bien. El riesgo es alto, pero también es alta la confianza de la población en el ejército. Más nos vale reconstruir nuestras instituciones civiles a fin de mantener esa confianza en el futuro. Confianza que no se tiene en los jueces. Por lo mismo, HRW denuncia un patrón de abuso e impunidad que alcanza a las autoridades judiciales. Porque en esto va la fuerza, pero también la capacidad de un sistema justicia que no ha sido depurado.
En la locura de los enfrentamientos, ya comienzan a surgir voces que ven en la legalización de las drogas una alternativa a considerar. No obstante, ese no será el legado de Calderón.
11 de noviembre 2011
Milenio http://laguna.milenio.com/cdb/doc/impreso/9060170
Michoacán, las encuestas y la inutilidad del juicio político
Como siempre las elecciones, las últimas del año. Ahora la mirada está en Michoacán, donde la hermana del presidente, Luisa María Calderón, cerró la contienda con las encuestas a favor del PAN. Por lo mismo, nada más aburrido en una elección cuando desde el principio se sabe que un partido o candidato ganará. Pero la disputa por la gubernatura de Michoacán no ha decepcionado en competencia política. Ahí donde el PRD ha sido bastión por dos sexenios, el PRI con Fausto Vallejo parecía puntear la elección durante los primeros meses del proceso, no obstante, el cierre se lo lleva el PAN. Muy probable el domingo por la tarde verificaremos esa tendencia, lo cual sería un respiro para los panistas de cara al 2012.
Y si para el PRD la elección michoacana les asegura el tercer lugar, no hay que esperar demasiado para conocer el resultado de las encuestas que definirán al candidato de ese partido para la grande. ¿Ebrard o López Obrador? Para el jefe del gobierno capitalino, la encuesta sería una salida elegante al nudo gordiano de la candidatura, porque casi nada que se dispute en el PRD está libre de autofagia. En las últimas semanas López Obrador se benefició ventajosamente de los tiempos oficiales que se conceden al PT y Convergencia. De esa manera, su imagen estuvo bien reforzada con cinco spots nacionales, aunque a destiempo y con ganas de no aplicar la ley, el IFE suspendió la propaganda a principios de mes. Así, a más tardar el viernes se divulgarán los resultados.
Para después del domingo 13, vaya número, algunos ya especulan sobre la suerte del presidente del PRI, otros como Manlio Fabio Beltrones, nos dice que ahora sí explicará la deuda de Coahuila. Veremos. Por lo pronto, y a pesar del escándalo, Moreira sigue ahí.
Acá en Coahuila, el grupo de Coparmex Laguna y la asociación Claridad y Participación ciudadana continúan las protestas contra la deuda. A esto habría que sumar el proyecto de ley de ingresos, donde ya se ven nuevos impuestos y hasta un ISN del 3 por ciento. ¿Para qué quieren más dinero? Para pagar la gigantesca deuda. Así el círculo vicioso…
También, el ex candidato en Coahuila, Jesús González Schmal, ya impulsa el juicio político contra Moreira. Sin embargo, invocar esa figura constitucional es casi inútil en nuestro sistema político. Más fácil era en el autoritarismo, y conste que no es un elogio al pasado, quitar a un funcionario o deponer a un gobernante. Vivimos en el siglo XXI, pero todavía operamos con muchas de las reglas del pasado. La petición puede entrar a la Cámara de diputados, pero así como llegue, será desechada por la mayoría tricolor.
Mientras pienso en la inutilidad del juicio político en México, los griegos ya desecharon a su primer ministro, y los italianos, que habían perdonado las pasiones de “Il Cavaliere”, ahora ya no le perdonan la megadeuda pública. Por medio de una moción de confianza, el parlamento llevó al primer ministro, Silvio Berlusconi, a precipitar su renuncia. Pobre es una democracia que limita la capacidad de los ciudadanos para defenderse de sus gobernantes.
9 de noviembre 2011
Milenio http://impreso.milenio.com/node/9058607
Y si para el PRD la elección michoacana les asegura el tercer lugar, no hay que esperar demasiado para conocer el resultado de las encuestas que definirán al candidato de ese partido para la grande. ¿Ebrard o López Obrador? Para el jefe del gobierno capitalino, la encuesta sería una salida elegante al nudo gordiano de la candidatura, porque casi nada que se dispute en el PRD está libre de autofagia. En las últimas semanas López Obrador se benefició ventajosamente de los tiempos oficiales que se conceden al PT y Convergencia. De esa manera, su imagen estuvo bien reforzada con cinco spots nacionales, aunque a destiempo y con ganas de no aplicar la ley, el IFE suspendió la propaganda a principios de mes. Así, a más tardar el viernes se divulgarán los resultados.
Para después del domingo 13, vaya número, algunos ya especulan sobre la suerte del presidente del PRI, otros como Manlio Fabio Beltrones, nos dice que ahora sí explicará la deuda de Coahuila. Veremos. Por lo pronto, y a pesar del escándalo, Moreira sigue ahí.
Acá en Coahuila, el grupo de Coparmex Laguna y la asociación Claridad y Participación ciudadana continúan las protestas contra la deuda. A esto habría que sumar el proyecto de ley de ingresos, donde ya se ven nuevos impuestos y hasta un ISN del 3 por ciento. ¿Para qué quieren más dinero? Para pagar la gigantesca deuda. Así el círculo vicioso…
También, el ex candidato en Coahuila, Jesús González Schmal, ya impulsa el juicio político contra Moreira. Sin embargo, invocar esa figura constitucional es casi inútil en nuestro sistema político. Más fácil era en el autoritarismo, y conste que no es un elogio al pasado, quitar a un funcionario o deponer a un gobernante. Vivimos en el siglo XXI, pero todavía operamos con muchas de las reglas del pasado. La petición puede entrar a la Cámara de diputados, pero así como llegue, será desechada por la mayoría tricolor.
Mientras pienso en la inutilidad del juicio político en México, los griegos ya desecharon a su primer ministro, y los italianos, que habían perdonado las pasiones de “Il Cavaliere”, ahora ya no le perdonan la megadeuda pública. Por medio de una moción de confianza, el parlamento llevó al primer ministro, Silvio Berlusconi, a precipitar su renuncia. Pobre es una democracia que limita la capacidad de los ciudadanos para defenderse de sus gobernantes.
9 de noviembre 2011
Milenio http://impreso.milenio.com/node/9058607
lunes, 7 de noviembre de 2011
Un mundo de 7 mil millones
Confieso que es difícil asimilar la cifra, pero somos un mundo de 7 mil millones de habitantes, y quién sabe si dentro de 50 años llegaremos a los 10 mil millones. El gran empuje demográfico lo tomamos en 1950 y a la fecha la tendencia es “ligeramente” creciente. China e India son enormes motores. África también se apunta. Sin embargo, hace unos dos mil años, la población mundial era de unos 300 millones de personas. Tuvieron que pasar 1600 años para que la población se duplicara. ¡De ese tamaño eran los cambios!
Los datos los pueden encontrar en el informe de la ONU, Estado de la población mundial 2011. A raíz de la lectura que hice del documento, volví a ver la película dirigida por Alfonso Cuarón, Niños del hombre (2006), donde se incluye un perturbador documental. Retomo la historia: es 2027 y el mundo perdió la fertilidad. El hombre más joven de la tierra, con 18 años, acaba de ser asesinado en Buenos Aires y la noticia conmociona por todos lados. En vez de crecimiento, la humanidad vive un largo periodo de infertilidad.
El filme es una antiutopía inquietante, pero no lo son menos las utopías descritas por Platón, Moro, Fourier o Marx. En el siglo pasado Aldous Huxley y George Orwell imaginaron sociedades terribles. Para el primero la tecnología significó el camino de un mundo feliz; para el segundo, la tecnología conduce a un nuevo orden totalitario.
Nunca han faltado alternativas a los problemas inherentes del crecimiento demográfico. Ante la crisis que vivía Irlanda en 1729, Jonathan Swift hizo una “Modesta proposición” para resolver el problema del hambre y la pobreza. Su propuesta es una cruel e irónica distopía. Hoy, cualquier distraído lector podría terminar indignado con esa lectura.
Ortega y Gasset veía con desconfianza el imparable fenómeno de las masas en el siglo XX. “Es lo mostrenco social”, escribió con cierto espanto en uno de sus más célebres ensayos. Para el filósofo español “asistimos al triunfo de la hiperdemocracia”. Actualizando esta idea, Slavo Zizek considera que la tiranía del siglo XXI se llama democracia. Según este filósofo pop, tenemos una versión “descafeinada” de los viejos principios democráticos. Polémica para otra discusión.
Por su parte, Elias Canetti, quien escribió un catálogo sobre las masas, nos dice que su origen es tan enigmático como universal: “Hay una compulsión de crecer”. Aunque el informe de la ONU prefiere, en palabras de Babatunde Osotimehin, no concentrarse en preguntas dramáticas, como “¿Cuánta gente puede sostener nuestra Tierra?”, tenemos una serie de datos y tendencias innegables: altos niveles de desigualdad; modelos económicos poco sustentables; una mayor expectativa de vida frente al problema de las pensiones; migraciones; el diseño de las ciudades; la explotación de los recursos naturales e incluso, el llamado cambio climático.
Hay un dato notable: los jóvenes menores de 25 años de edad representan un 43% de la población mundial. En buena medida, ese segmento está llamado a definir el siglo XXI. Aunque nunca se sabe en qué acabará todo esto, ahora pienso en las palabras de Lévi-Strauss: “El mundo empezó sin el hombre y terminará sin él”.
6 de noviembre 2011
Milenio http://impreso.milenio.com/node/9056963
Los datos los pueden encontrar en el informe de la ONU, Estado de la población mundial 2011. A raíz de la lectura que hice del documento, volví a ver la película dirigida por Alfonso Cuarón, Niños del hombre (2006), donde se incluye un perturbador documental. Retomo la historia: es 2027 y el mundo perdió la fertilidad. El hombre más joven de la tierra, con 18 años, acaba de ser asesinado en Buenos Aires y la noticia conmociona por todos lados. En vez de crecimiento, la humanidad vive un largo periodo de infertilidad.
El filme es una antiutopía inquietante, pero no lo son menos las utopías descritas por Platón, Moro, Fourier o Marx. En el siglo pasado Aldous Huxley y George Orwell imaginaron sociedades terribles. Para el primero la tecnología significó el camino de un mundo feliz; para el segundo, la tecnología conduce a un nuevo orden totalitario.
Nunca han faltado alternativas a los problemas inherentes del crecimiento demográfico. Ante la crisis que vivía Irlanda en 1729, Jonathan Swift hizo una “Modesta proposición” para resolver el problema del hambre y la pobreza. Su propuesta es una cruel e irónica distopía. Hoy, cualquier distraído lector podría terminar indignado con esa lectura.
Ortega y Gasset veía con desconfianza el imparable fenómeno de las masas en el siglo XX. “Es lo mostrenco social”, escribió con cierto espanto en uno de sus más célebres ensayos. Para el filósofo español “asistimos al triunfo de la hiperdemocracia”. Actualizando esta idea, Slavo Zizek considera que la tiranía del siglo XXI se llama democracia. Según este filósofo pop, tenemos una versión “descafeinada” de los viejos principios democráticos. Polémica para otra discusión.
Por su parte, Elias Canetti, quien escribió un catálogo sobre las masas, nos dice que su origen es tan enigmático como universal: “Hay una compulsión de crecer”. Aunque el informe de la ONU prefiere, en palabras de Babatunde Osotimehin, no concentrarse en preguntas dramáticas, como “¿Cuánta gente puede sostener nuestra Tierra?”, tenemos una serie de datos y tendencias innegables: altos niveles de desigualdad; modelos económicos poco sustentables; una mayor expectativa de vida frente al problema de las pensiones; migraciones; el diseño de las ciudades; la explotación de los recursos naturales e incluso, el llamado cambio climático.
Hay un dato notable: los jóvenes menores de 25 años de edad representan un 43% de la población mundial. En buena medida, ese segmento está llamado a definir el siglo XXI. Aunque nunca se sabe en qué acabará todo esto, ahora pienso en las palabras de Lévi-Strauss: “El mundo empezó sin el hombre y terminará sin él”.
6 de noviembre 2011
Milenio http://impreso.milenio.com/node/9056963
El Coahuila de Jorge Torres
Lejos nos encontramos de aquel momento apoteósico, noviembre de 2010, cuando el entonces gobernador Humberto Moreira presentó el Quinto Informe de Gobierno. La aclamación era unánime y el Coliseo Centenario en Torreón aglutinó a un buen número de priistas, sobre todo, a los principales actores del PRI nacional, incluido el precandidato Enrique Peña Nieto. En su más alto nivel de popularidad, Moreira informó de los logros de su gobierno. Por entonces no se conocía el escándalo de la deuda y la falsificación de documentos. Lo habían ocultado bien.
En otras circunstancias, el Sexto Informe con Jorge Torres, fue una ceremonia breve y modesta. Se notó que el gobernador sustituto, lo que quería era entregar y terminar lo más rápido posible. Visiblemente nervioso, titubeante a lo largo de la exposición, dejó en claro su disminuido papel al frente del ejecutivo. Pero sería un despropósito no reconocer las obras públicas, sobre todo las realizadas con esmero en Saltillo. Igualmente hay que reconocer el sello social del gobierno y el interés por atender a diversos grupos vulnerables. Aunque quien haya leído con atención el informe del Coneval, sabrá que la pobreza en Coahuila sí disminuyó, pero no en la franja de la pobreza extrema; esa si movió ¡0.3 puntos!
El momento más esperado, y por lo mismo, el más insustancial, fue cuando el gobernador se refirió al tema de la deuda en el Estado. Justificó el endeudamiento en función del “gran” desarrollo, porque “Coahuila es otro”. No obstante, a fin de no quedarnos con las palabras, habrá que ver con calma el informe por escrito, y también la cuenta pública. Además todavía falta esperar a que liberen los informes financieros de 2010 y el cierre de 2011.
Jorge Torres habló de la deuda sin mencionar nada de la falsificación de documentos con la que se contrató una parte. Según datos más actualizados, ya asciende a los 5 mil 300 millones de pesos. En ese sentido, fue notable la ausencia de ese punto en el Informe, porque habló de la deuda como si de por medio no hubiera ninguna contratación fraudulenta. Ni siquiera sugirió exigir justicia en esa materia, sino sencillamente se desentendió diciendo que el estado queda en buenas manos con Rubén Moreira. Con un ¡Viva Coahuila! Torres se fue sin explicar a cabalidad el problema de la deuda, sólo insistió en que “Coahuila es mejor”.
El problema no está en las obras, sino en la deuda mal habida que tendremos que pagar los coahuilenses.
El próximo mes, el gobernador electo habrá de asumir el cargo, pero su legitimidad ya no sólo proviene de los más de 700 mil votos obtenidos en la elección pasada, sino provendrá también de su compromiso para aclarar la deuda y llevar a la justicia a la red que tejió el fraude. Por lo mismo, no basta un “chivo expiatorio”; hace falta todo un corral. 4 de noviembre 2011
Milenio http://impreso.milenio.com/node/9056030
Yo soy el que está ofendido
Los enredos de la deuda no terminan por más que se diga de grandes obras y desarrollos. Por donde se le vea, los estragos de la deuda en Coahuila limitan al gobierno mismo. Agobiado, el artífice de los descomunales empréstitos se dice ofendido. Su actitud y sus palabras distan mucho del Humberto Moreira bravucón y dicharachero que marcó la agenda de los medios nacionales como presidente del PRI.
Si Vicente Fox resumió su sexenio con un “comes y te vas”; o el lapidario: “¿Y yo por qué?”. El paso de Moreira por la presidencia de su partido ya queda definido por el sentido del martirio: “En cuanto a dejar el cargo en el comité nacional, a ver, no habría por qué. Yo soy el que está ofendido en esto y el que está interponiendo una denuncia”.
Desde luego, la ofensa que acusa el coahuilense no es por la documentación falsa que ampara unos 3 mil millones. Tampoco ofenden las mentiras que buscan eludir la carga de la corrupción. No, eso no es nada. Lo que ofende es el cuestionamiento, la insistencia en el tema de la deuda, la duda sobre la permanencia en la presidencia de su partido.
En su camino a los Pinos, Enrique Peña Nieto ha demostrado ser un político pragmático, pero ¿cuánto más va a sostener a Moreira en la presidencia del partido? Aunque coahuilense no quiere irse, ya acepta que en febrero podría hacerlo.
Por lo pronto, en Coahuila un gran espectáculo causó el fin de semana la detención de Javier Villarreal, el exsecretario del Satec y responsable en momentos claves de los dineros del estado. En realidad, la farsa de su detención sólo corrobora la naturaleza de la justicia en el Estado, por lo demás, sorprendentemente rápida y expedita. Quizá se buscó “vacunar” al responsable de las finanzas, y por lo mismo, está tranquilo porque pagó una insignificante fianza, una ganga si pensamos en los 3 mil millones de pesos. La historia reciente en Coahuila nos señala un caso emblemático de corrupción que terminó con el sello de la impunidad. Me refiero a la megaobra del Distribuidor Vial que hoy palidece frente a una deuda de miles de millones.
Pero si la Fiscalía alentó el espectáculo, es posible que la Procuraduría Fiscal de la Federación vaya en otro sentido al presentar la denuncia por la contratación de la deuda con documentos apócrifos. Aun así, estoy escéptico de lo que pueda suceder, aunque no se descarta para algunos, el beneficio electoral de castigar a delincuentes de cuello blanco.
2 de noviembre 2011
martes, 1 de noviembre de 2011
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