Escrito en pequeños relatos y episodios cronológicos, el texto, como dice en la introducción Humberto Roque Villanueva, es mitad crónica, mitad análisis. El libro se basa en fuentes hemerográficas de los periódicos El Siglo, La Opinión y el Noticias. Incluso, al transcribir esos diarios, quedó plasmado el estilo periodístico de cada época.
Cito un párrafo significativo: “Entre zafarranchos y escándalos se llevaron a cabo ayer las elecciones. La Ferita y La Paloma Azul fueron teatro de choques sangrientos. Hubo varios heridos, la manifestación fue disuelta por las tropas federales. Varias aprehensiones”. Ese fue el tono de la elección donde Nazario Ortiz Garza fue electo gobernador de Coahuila y Pascual Ortiz Rubio presidente de la República. Hasta 1929 el ambiente electoral en el país se resolvía con violencia. Fue Plutarco Elías Calles, el genio institucional que fundó el Partido Nacional Revolucionario, quien logró establecer una pacífica transferencia del poder. Aunque su trasmisión para mal de la democracia, sólo aceptó un partido.
En esa circunstancia, el primer Comité en Torreón tuvo como presidente a Isidoro Mijares; Julio Larriva vicepresidente; Rafael Martínez y Aureliano secretarios; vocales: Bibiano Andrade, Alfonso Rodríguez, Manuel Ríos, Gilberto Caballero y Juan de la Cruz.
A pesar de la hegemonía del partido, el conflicto y las dificultades están presentes. Por ejemplo, no era la primera vez que en Torreón dos candidatos se proclamaran alcaldes simultáneamente. Tampoco fue la primera vez que un alcalde “legítimo” quizo tomar la alcaldía por el electo legalmente. En 1940 compitieron Julio Larriva y Francisco de la Fuente. Ambos denunciaron chanchullos. Al final Larriva fue alcalde, pero dos años después se suicidó.
Por otra parte, Hernández Vélez hace una notable reivindicación de la memoria de Mariano López Mercado, y su “sacrificio por el partido” por dejar la alcaldía. Al tiempo, ganó el PAN la primera alcaldía con Jorge Zermeño de candidato; pero esa es harina de otra historia que pronto se publicará.
11 abril 2012
Milenio http://www.milenio.com/cdb/doc/impreso/9144198