Termina
el año y es necesario un corte de caja, un balance sobre lo sucedido. Porque no
es suficiente vernos a nosotros mismos, así caemos fácilmente en la
autocomplacencia. Debemos preguntarnos cómo estamos, sí, pero también en relación
a quiénes. Por finalizar el 2012, varios estudios sitúan a La Laguna en
diferentes posiciones. En unas más, en otras menos. Pero dónde estamos en eso
de la competitividad con respecto a otras ciudades mexicanas.
Calidad de vida en las ciudades. Fuente: GCE
Satisfacción con servicios públicos gubernamentales. Fuente: GCE
Basado sólo en la
percepción de los ciudadanos, el Índice de Calidad de Vida que publicó recientemente la empresa Gabinete
de Comunicación Estratégica (GCE) nos sitúa mal, incluso nos ubica en principio
de las ciudades menos habitables. Si a nivel nacional Saltillo obtuvo la mejor
calificación en los servicios públicos entre 41 ciudades, Torreón fue lo
opuesto, ya que se ubicó entre los últimos lugares de satisfacción.
Otros
estudios más amplios han sido realizados por el IMCO y el CIDE. El primero lo
comenté en esta columna durante el mes de agosto. Ese indicador que midió a 77
ciudades nos ubicó en el lugar 44. Es decir, de media tabla hacia abajo. Muy lejos
quedamos de las épocas en que Torreón ocupó un lugar entre los primeros diez.
Igualmente
el CIDE acaba de publicar su actualización del Índice de competitividad de lasciudades mexicanas 2011. A diferencia del estudio de competitividad del IMCO,
el del CIDE es más consistente y
robusto. Realizado sin la inmediatez de publicar datos, el estudio parte de una
amplia base académica que compara 74 zonas metropolitanas y 365 municipios en
el país. Otro aspecto a favor de ese
trabajo comparativo es la generación de series en 2003, 2007 y ahora se publica
la de 2011. El índice se construyó con cuatro componentes que abarcan aspectos
económicos, institucionales, demográficos y urbano-ambientales. Cada uno valora
por separado y en su conjunto el puntaje de las ciudades más competitivas del
país.
4 de 3 en Torreón y la Zona Metro. Fuente: CIDE.
A diferencia de los otros estudios, en este la ciudad de Torreón y su
zona metropolitana no salen mal (Gómez Palacio, Lerdo y Matamoros). En lo
económico y en el perfil demográfico la región supera los 80 puntos entre 100.
En la parte institucional alcanzamos 79 puntos. Donde sí reprobamos es en el
ámbito urbano, es decir, en la calidad de los servicios urbanos. No solamente
gubernamentales, sino privados. Piensen en los parques industriales, en la
escuelas y las universidades (un montón de sucursales “patito”), en el deterioro
ambiental (sí, ese indicador cuenta mucho), en la conectividad, en los centros
de investigación (inexistentes a pesar de las multiplicación de las
universidades). Todo eso pesa para que una región despegue o se quede a media
tabla.
Ahí sólo logramos 46 puntos, lo
cual verifica los resultados del estudio de GCE. Mientras en unas cosas
crecemos como todo una metrópoli, en otras parecemos un ranchote. En promedio
obtuvimos 73 puntos, ocupando el lugar número 14 de 74. Sin duda mejor que en
otras mediciones. Claramente tenemos fortalezas y ventajas, lo cual es
alentador, pero también tenemos debilidades que nos estancan. En esas habría
que enfocarnos.
Posdata para los
cabildos.
En
ese mismo estudio del CIDE, el prestigioso Enrique Cabrero concluye: “En el
caso de México, el Cabildo es una estructura muy anquilosada y claramente
rebasada por la realidad de la vida de las ciudades. El diseño y funcionamiento
actual de los cabildos municipales es un obstáculo para la promoción de una
agenda para la competitividad urbana”.