domingo, 16 de diciembre de 2012

Los símbolos


A más de un crítico nos ha sorprendido el inicio del gobierno de Enrique Peña Nieto. Ordenado, con una agenda clara en la mano y con el firme interés de fortalecer al Estado mexicano. Al mismo tiempo el nuevo gobierno a atendido los temas desdeñados. Está el merecidísimo reconocimiento al padre Alejandro Solalinde. Pero también la decisión del ejecutivo de retirar la controversia constitucional en relación a la Ley de víctimas. Igualmente están las iniciativas para fortalecer la transparencia. 

Aunque es un tanto apresurado sacar conclusiones, sí se percibe una diferencia entre el gobierno que por fortuna ya terminó y el que ahora inicia. Si a los panistas les disgustó llenar el poder. A los priitas se le reconoce una vocación por el mismo. Tengo la sensación de que estamos ante un retorno de la república en sentido lato. Lo más reciente es lo que podría llamarse la toma de la educación para el estado mismo. Durante décadas la educación pública ha estado secuestrada por el sindicato y sobre todo, por el líder en turno. Hoy “la Maestra” Elba Esther Gordillo podría conocer los límites del Estado. Ojalá así sea. Pero también que venga un compromiso genuino para salir del atraso educativo.

12-12-12
Milenio http://laguna.milenio.com/cdb/doc/impreso/9166959