Mucha tinta ha corrido sobre los jóvenes de la Ibero, el movimiento #YoSoy132 y la multiplicación de las manifestaciones en el país. También ya se hicieron las inevitables comparaciones con los jóvenes de la Primavera árabe, los indignados españoles, los estudiantes chilenos e incluso otros movimientos en la historia como el 68. Algunas comparaciones son desproporcionadas, pero otras ayudan a dimensionar la protesta mexicana. Un Mubarak o un Gadafi gobernaron por décadas con regímenes duros. En la realidad mexicana, no obstante de ser una democracia, hay herencias autoritarias igual o más viejas. En doce años de gobierno el PAN no pudo ni quiso desmontarlas; hoy disputa con razón el segundo lugar en la contienda presidencial.
En el país hay estados que nunca han sido gobernados por otro partido. Coahuila es uno de ellos, y también sirve como ejemplo de corrupción para el Departamento de Estado de nuestro vecino del Norte. Por lo mismo, en las calles los jóvenes nos advierten sobre el obsoleto sistema político mexicano, aunque dudo que nuestros políticos quieran entender el momento.
Esos jóvenes que protestan son la parte más privilegiada del país, la que incluso estudia en universidades privadas como la Ibero o el ITAM, por mencionar algunas. Son universitarios de clase media, con buen acceso a las redes y capacidad de respuesta. Muchos de ellos están de edad de votar por primera vez en la elección de julio. Por ahora han centrado sus críticas en Peña Nieto y el duopolio, pero también ven con reserva a otros actores políticos.
En tales circunstancias la Universidad Iberoamericana en Torreón recién publicó los resultados de la Encuesta sobre Cultura Política, 2012. El momento no podía ser mejor. Gracias al maestro Gerardo Rivera supe de manera preliminar del estudio durante el foro de marketing político en el que participamos junto al profesor Krismell Grullón, el pasado mes de abril. Ahora, ¡y vaya que lo exige nuestro presente! se puede acceder al estudio en el sitio ww.lag.uia.mx. Comento los principales resultados.
Aplicaron una muestra de 148 entrevistas a los alumnos de doce carreras. La gran mayoría son jóvenes que viven en Torreón. Lo datos evidencian un perfil no exento de contradicciones y paradojas. Las tres instituciones en las que más confianza tienen son los maestros, la iglesia y los ¡medios de comunicación!
Hay gran desconfianza en el ejército, así lo afirmó 63%. Prácticamente 1 de cada 2 aprueba el trabajo del Presidente de la República; y sólo 34% aprobó el trabajo del gobernador de Coahuila; el alcalde de Torreón fue aprobado por el ¡8 por ciento!
Aunque el 63% de los alumnos declararon interés por la política, a la hora de preguntarles si estaban dispuestos a participar como funcionarios de casilla, 76% contestó que no. Parece más fácil para los jóvenes expresarse de lejos, piensen en las redes sociales, que la engorrosa tarea de hacer política.
70% no supo cuánto dura un Diputado Federal en el cargo. 78% tampoco supieron cuánto dura un senador.
La redes sociales (Facebook, Twitter) compiten con la televisión como medio de información sobre la política. 76% no acude al periódico como fuente de información. Por las mismas la radio y las revistas. Aunque la muestra del estudio es pequeña, el microcosmos de la Ibero en nuestra ciudad refleja de alguna manera la cultura política que prevalece en los jóvenes. Y claro, hay un reconocimiento mayoritario de que la política es complicada (69%).
Nadie dijo que fuera fácil. ¡Bienvenidos!
27 de mayo 2012
Milenio http://laguna.milenio.com/cdb/doc/impreso/9148668