Nuevamente la barbarie y el odio se
imponen a punta de violencia. Ahora tocó en Orlando, pero antes fue en Bélgica
y París. Si vamos más atrás, la lista es larga y dolorosa. Unos son fanáticos,
otros tienen motivaciones religiosas, pero la constante es el odio y la
violencia como principal manifestación. Con razón Hobbes definió al hombre como
lobo para el hombre, Homo homini lupus.