lunes, 26 de diciembre de 2016

Duarte sí ¿y Moreira?

"Honestidad"

Veracruz tiene para todo. Tan generosa es la entidad, que da para  lujosas casas en Estados Unidos, grandes cuentas bancarias y poder sin límites. Woodlands es la zona favorita de Houston para los políticos. Así, tanto ha dado Veracruz por la patria, que alcanza para un generoso heredero, facturas millonarias de empresas fantasmas, e incluso, una casa para la suegra en la exclusiva zona residencial del momento. Javier Duarte, todavía gobernador, sustituyó a La maestra, como el villano favorito. El más visible, el más odiado. Tanto así, que hasta su partido ya reniega, o al menos finge repudiarlo. En la ignominia, hasta el ex candidato del PRI a la gubernatura de Veracruz, Héctor Yunes Landa, apoya que Duarte sea expulsado del partido. Por su parte, Enrique Ochoa Reza, el bromista involuntario que lidera al PRI, no se cansa de pronunciar un discurso absolutamente contradictorio. ¡Combatir la corrupción! Para muestra, suspendieron los derechos políticos de Duarte y su camarilla. En seguida Duarte defiende su dignidad a través de los diputados federales y locales. Todo sea por el honor. Como parte de esa cruzada increíble —el PRI contra la corrupción—, Ochoa Reza acusa filtraciones de sus adversarios, como la indemnización millonaria que recibió el ex director de la CFE.  
No obstante, a pesar de las evidencias, los desfalcos millonarios, la deuda impagable, Duarte goza de impunidad. En la lógica de la corrupción democrática, el gobernador asume que él es corrupto, pero siempre hay un corrupto más grande que él: el presidente. Para citar a un clásico de la política mexicana, César Camacho, ¿con qué calidad moral acusan? Lo revelador del proceso interno del PRI contra Duarte, que en realidad no es nada, es la ausencia de su maestro: Humberto Moreira. El veracruzano sólo imitó. Endeudó al estado hasta la inoperancia financiera, desvió recursos millonarios, se fue a invertir a Texas, y por si fuera poco, también tuvo una casa para la suegra. En plena precampaña para renovar la gubernatura de Coahuila hacia 2017, el PRI ya le hizo la mitad de la campaña al PAN.
Como parte de una investigación, el gobierno de Estados Unidos, acusó a la suegra de Humberto Moreira, de comprar una muy buena casa en San Antonio con dinero ilícito. En aquella ocasión, hará casi un año, el abogado de la suegra, declaró: “Fue comprada de manera limpia, ella es la dueña de esa casa y el Gobierno de Estados Unidos está tratando de robársela”. ¿Pero quién trata de robar a quién? Hace uno días, la suegra entregó finalmente la casa, valuada en 602 mil dólares, unos 12 millones de pesos. Ya solo es cuestión de tiempo, para que el gobierno estadounidense la venda como hizo con  los bienes incautados a Javier Villarreal. Por supuesto, en Coahuila el gobierno no reclama los bienes, que según las autoridades gringas, fueron compradas con dinero “robado” al gobierno estatal. ¡Coahuila avanza!
Pero curiosamente, ni Morera I, ni Moreira II van a Estados Unidos. Cada vez más, el círculo se cierra gracias al gobierno gringo. También, ya acaban de anunciar que la audiencia para dictar sentencia a Javier Villarreal, un genio financiero, fue pospuesta para el 12 de abril del siguiente año, justo cuando las campañas por la gubernatura estén en pleno apogeo. A los gringos no les enseñamos política.
Para no alejarnos del relato, hace unos días, el diario Reforma reveló que el gobierno de Coahuila ha pagado millones de pesos a empresas fantasma. Consultoras que venden pollo. Negocios que no existen y jugosas facturas que suman millones y millones de pesos. Hasta portales de internet inexistentes. Hasta ahí, nada que sea anómalo o extraño al gobierno de Moreira II. Más aún, el monto de las facturas es poca cosa, a lado de la deuda de Coahuila. Sin embargo, por todos lados hay atracos y ningún responsable. El paradigma es la deuda, los documentos falsificados y la defensa de la impunidad. Pero de ahí para abajo, lo mismo se “pierde” el dinero de las pensiones de los maestros, al Tribunal lo roban y no hay ningún responsable por el daño. Ahora, un escándalo más revelado por Reforma. ¿Quién va a dar la cara? Ismael Ramos Flores, el contralor que no vio nada con Moreira I,  ahora Secretario de Finanzas con el hermano. Sin duda, ¡Coahuila avanza!

28 de septiembre
El Siglo https://www.elsiglodetorreon.com.mx/noticia/1266943.duarte-si-y-moreira.html